El
paseo se ha convertido un rito obligado para muchas personas. El
camino del
molino es una de las sendas preferidas. El camino asfaltado, llano, cerca del
rio y preciosas vistas del
campo y de la
montaña palentina, convierten la caminata en un momento de salud y de encuntro. Para descansar nada mejor que la base del
monumento de Sta. Maria.