Habrá que soñar un poco y esperar que un día las empresas que prestan servicios a los pueblos, lo hagan con gusto y con respeto medioambiental, cuidando hasta el impacto visual. Ellas tiene medios y la ley debiera obligarlas a respetar los derechos de los pueblos. Mientras tanto, que los sepan, seguiremos "cableados" con sus actuaciones. Que esta foto sirva también de protesta.