MANTINOS: Carlos, yo entro, y si no hay nadie, lo dejo.

Mayte como siempre anda tarde y a Imelda no la gusta estar sola

Claro Carlos, no me contesta nadie, pues lo dejo.

Tenemos que dar tiempo al tiempo que siempre aparece alguien, por la noche

Carlos, yo entro, y si no hay nadie, lo dejo.