Aqui os dejo esto para la próxima celebración de San Isidro el día 15 de Mayo.
SAN ISIDRO LABRADOR
El 15 de mayo, Día de San Isidro, una fiesta muy importante en el pueblo. En aquellos años la mayoría, por no decir todos, éramos labradores. Labradores desde la mañana hasta la noche, siempre había algo que hacer, qué bien nos venía en el mes de mayo, que ya empezaban las tareas a coger ritmo, un pequeño descanso.
La víspera se colocaba al Santo en las andas y se le adornaba con flores que cogían en la Riguera, eran lilas blancas, también se limpiaban los candelabros y la iglesia. Todo estaba preparado para la fiesta.
A la hora de misa, repicaban las campanas como lo hacen los días de fiesta. La misa era cantada por las cantoras, que antes habían ensayado con mucho entusiasmo y las salía siempre de maravilla
Cuando se salía de la misa, todos íbamos a la Plaza. Allí, a los niños les ponían en fila y les daban unas galletas y los representantes del pueblo y la gente subían al Sindicato y comían y tomaban unos vinos.
Por la tarde, los hombres iban a echar la partida a los bares, unos a la cantina de David, otros a la de Juan o la de Bodio. Los jóvenes, se cogían la merienda y todos juntos desde la Plaza se iban a la Campera de San Juan. ¡Qué divertido! Unos corrían como si les fuera a faltar sitio, otros voceaban y gritaban y los más mozos cantaban y se reían hasta que llegaban a la Campera. Se dejaba la tortilla y lo primero que se hacía era ir corriendo a dar vueltas al pozo de la nevera, se caían, lloraban, pero otra vez a seguir como si no pasaba nada. ¡A merendar! Se oía, y cada uno con su grupo a buscar una zona que tuviera hierva para sentarse. Todos comiendo con unas ganas tremendas y no sobraba ni las migas. Al terminar la tarde, otra vez para el pueblo, recordando lo bien que lo habíamos pasado.
Al volver, se coincidía con la llegada de la cienda y todos a cambiarse de ropa para seguir con la rutina diaria. Yo recuerdo que todos nos lo pasábamos ¡GENIAL!
San Isidro labrador
Labraba en su quintería
Y, de qué salía a labrar,
Era más de medio día;
Los de aquellos buenos días
…………. Por la tarde íbamos a la campera de San Juan a merendar. Allí en el pozo de la nevera cuántas vueltas dábamos, algunos se chocaban y como es lógico a llorar. También espiábamos a los mayores entre las matas. Antes San Isidro se celebraba de otra manera, claro, también en el pueblo era toda la gente o casi toda labrador. Lo primero la misa. Después en la plaza, los niños en fila y nos daban una o dos galletas. Los mayores subían al sindicato y comían y bebían hasta la hora de comer (algunos ya venían alegres....) Por la tarde cogíamos la merienda y todos a comerla a la campera de San Juan.
…………. San Isidro es considerado el patrono de los campesinos y así se celebra, aunque en verdad campesinos había pocos en Mantinos. El pueblo se junta y celebra su fiesta. Los mozos iban a nidos y con los huevos encontrados y más los robados, hacían tortillas, marchando a merendar a la Atalaya o a la campera de S. Juan………
SAN ISIDRO LABRADOR
El 15 de mayo, Día de San Isidro, una fiesta muy importante en el pueblo. En aquellos años la mayoría, por no decir todos, éramos labradores. Labradores desde la mañana hasta la noche, siempre había algo que hacer, qué bien nos venía en el mes de mayo, que ya empezaban las tareas a coger ritmo, un pequeño descanso.
La víspera se colocaba al Santo en las andas y se le adornaba con flores que cogían en la Riguera, eran lilas blancas, también se limpiaban los candelabros y la iglesia. Todo estaba preparado para la fiesta.
A la hora de misa, repicaban las campanas como lo hacen los días de fiesta. La misa era cantada por las cantoras, que antes habían ensayado con mucho entusiasmo y las salía siempre de maravilla
Cuando se salía de la misa, todos íbamos a la Plaza. Allí, a los niños les ponían en fila y les daban unas galletas y los representantes del pueblo y la gente subían al Sindicato y comían y tomaban unos vinos.
Por la tarde, los hombres iban a echar la partida a los bares, unos a la cantina de David, otros a la de Juan o la de Bodio. Los jóvenes, se cogían la merienda y todos juntos desde la Plaza se iban a la Campera de San Juan. ¡Qué divertido! Unos corrían como si les fuera a faltar sitio, otros voceaban y gritaban y los más mozos cantaban y se reían hasta que llegaban a la Campera. Se dejaba la tortilla y lo primero que se hacía era ir corriendo a dar vueltas al pozo de la nevera, se caían, lloraban, pero otra vez a seguir como si no pasaba nada. ¡A merendar! Se oía, y cada uno con su grupo a buscar una zona que tuviera hierva para sentarse. Todos comiendo con unas ganas tremendas y no sobraba ni las migas. Al terminar la tarde, otra vez para el pueblo, recordando lo bien que lo habíamos pasado.
Al volver, se coincidía con la llegada de la cienda y todos a cambiarse de ropa para seguir con la rutina diaria. Yo recuerdo que todos nos lo pasábamos ¡GENIAL!
San Isidro labrador
Labraba en su quintería
Y, de qué salía a labrar,
Era más de medio día;
Los de aquellos buenos días
…………. Por la tarde íbamos a la campera de San Juan a merendar. Allí en el pozo de la nevera cuántas vueltas dábamos, algunos se chocaban y como es lógico a llorar. También espiábamos a los mayores entre las matas. Antes San Isidro se celebraba de otra manera, claro, también en el pueblo era toda la gente o casi toda labrador. Lo primero la misa. Después en la plaza, los niños en fila y nos daban una o dos galletas. Los mayores subían al sindicato y comían y bebían hasta la hora de comer (algunos ya venían alegres....) Por la tarde cogíamos la merienda y todos a comerla a la campera de San Juan.
…………. San Isidro es considerado el patrono de los campesinos y así se celebra, aunque en verdad campesinos había pocos en Mantinos. El pueblo se junta y celebra su fiesta. Los mozos iban a nidos y con los huevos encontrados y más los robados, hacían tortillas, marchando a merendar a la Atalaya o a la campera de S. Juan………