EN TRES MINUTOS JESÚS SALAMANCA ESCRITOR
«Trato de dar testimonio de aquello que ha desaparecido»
Leer el libro que Jesús Salamanca ha escrito bajo el título de 'Antaño' es como retornar al pasado para quienes ya han cumplido el medio siglo de vida. Recordar trabajos desaparecidos, juegos de niños o costumbres que, en muchos casos, sólo perduran en el recuerdo de algunos, y que Jesús Salamanca ha querido testimoniar en este libro para compartirlos con todos. Salamanca recuerda a su Portillo (Valladolid), pero sus recuerdos se pueden trasladar a muchos otros pueblos de Castilla y León.
- ¿Qué le llevó a escribir este libro?
-Contar a mis hijos relatos de cuando yo era pequeño. Historias, por ejemplo, de una caracola con el extremo cortado que había sobre la cómoda en casa de los abuelos y que servía para despertar a los piñeros, a primera hora de la mañana, para acudir al trabajo. O como los 'coritos' (acarreadores de mosto) llevaban el mosto en las 'pellicas' (piel que servía para guardar y transportar líquidos) desde los lagares hasta las bodegas. Y otras más que mi hija, Esther, me animó a que escribiera.
- ¿Qué ha querido expresar?
-Dar testimonio de aquello que existió y ha desaparecido, como todos aquellos trabajos que entonces se hacían y ahora no existen, los juegos que practicábamos los niños de entonces y, sobre todo, costumbres que hoy se las cuentas a nuestros hijos y se ríen como si les estuviésemos contando aventuras de tiempos ancestrales.
- ¿Ha sido costoso recopilar todos estos datos?
-Afortunadamente gozo de buena memoria y la mayoría de las cosas que aparecen en el libro han salido del archivo de mi cabeza. También he incorporado datos que he recopilado de otra gente, que tenían oficios desaparecidos y a los que les estoy enormemente agradecido.
- ¿A quién va dirigido el libro?
-A dos colectivos: a mi generación, a los que fuimos niños de entonces y jubilados ahora. Y también a los niños de hoy, para que lean lo que sus padres y abuelos hicieron en sus tiempos. Mi intención es que esta crónica de antaño no quede en el olvido. He tratado de que sea un recuerdo para mi generación y cultura del pueblo para los más jóvenes.
«Trato de dar testimonio de aquello que ha desaparecido»
Leer el libro que Jesús Salamanca ha escrito bajo el título de 'Antaño' es como retornar al pasado para quienes ya han cumplido el medio siglo de vida. Recordar trabajos desaparecidos, juegos de niños o costumbres que, en muchos casos, sólo perduran en el recuerdo de algunos, y que Jesús Salamanca ha querido testimoniar en este libro para compartirlos con todos. Salamanca recuerda a su Portillo (Valladolid), pero sus recuerdos se pueden trasladar a muchos otros pueblos de Castilla y León.
- ¿Qué le llevó a escribir este libro?
-Contar a mis hijos relatos de cuando yo era pequeño. Historias, por ejemplo, de una caracola con el extremo cortado que había sobre la cómoda en casa de los abuelos y que servía para despertar a los piñeros, a primera hora de la mañana, para acudir al trabajo. O como los 'coritos' (acarreadores de mosto) llevaban el mosto en las 'pellicas' (piel que servía para guardar y transportar líquidos) desde los lagares hasta las bodegas. Y otras más que mi hija, Esther, me animó a que escribiera.
- ¿Qué ha querido expresar?
-Dar testimonio de aquello que existió y ha desaparecido, como todos aquellos trabajos que entonces se hacían y ahora no existen, los juegos que practicábamos los niños de entonces y, sobre todo, costumbres que hoy se las cuentas a nuestros hijos y se ríen como si les estuviésemos contando aventuras de tiempos ancestrales.
- ¿Ha sido costoso recopilar todos estos datos?
-Afortunadamente gozo de buena memoria y la mayoría de las cosas que aparecen en el libro han salido del archivo de mi cabeza. También he incorporado datos que he recopilado de otra gente, que tenían oficios desaparecidos y a los que les estoy enormemente agradecido.
- ¿A quién va dirigido el libro?
-A dos colectivos: a mi generación, a los que fuimos niños de entonces y jubilados ahora. Y también a los niños de hoy, para que lean lo que sus padres y abuelos hicieron en sus tiempos. Mi intención es que esta crónica de antaño no quede en el olvido. He tratado de que sea un recuerdo para mi generación y cultura del pueblo para los más jóvenes.