Historia:
El
puente de Royales es una obra civil de cronología
medieval y moderna. Debido al desplazamiento del cauce del Pisuerga en los últimos decenios, los restos actuales se encuentran en territorio de
Olmos de Pisuerga, en la provincia de
Palencia. El puente quedó asociado en la Edad Media, probablemente en el siglo XIII, a un
hospital jacobeo que se levantó en su orilla occidental y cuya cofradía de
San Pedro, funcionando bajo patronato real desde al menos el siglo XV, se mantuvo hasta el XVIII. Los orígenes del puente podrían ser muy antiguos pues aprovecha la existencia de uno de los pocos vados rocosos que salvan el Pisuerga en esa zona, si bien los sondeos efectuados en la base de sus
pilas en 2020 no permiten retrasar su construcción más allá de la plena Edad Media, habiendo sufrido varias reconstrucciones desde entonces. Del último intento de reparación en 1784 pueden observarse aún algunas trazas, concretamente en la vanguardia occidental y en el arranque del
arco nº 3. Su papel debió ser importante durante la Edad Media y comienzos de la Edad Moderna dentro del circuito de las rutas jacobeas y de transporte de mercancías desde los
puertos cantábricos a la meseta castellana tales como lana, sal, hierro o grano, sin olvidar el importante tránsito de la cabaña ganadera. Parece que su declive como en tantos otros
puentes del reino comienza en el siglo XVII, cuando varias riadas lo inutilizan contribuyendo a su abandono y consiguiente paulatino deterioro. En 1785 la cofradía del Real Hospital de Royales solicita al Consejo de Castilla una reparación integral, algo que nunca se llevó a término por diferentes factores, principalmente el escaso interés de la ruta en la época. En 1835 todavía señoreaba sobre las
aguas del Pisuerga con varios
arcos en pie tal y como atestigua Madoz en su diccionario. Sin embargo, las crecidas anuales del Pisuerga y sobre todo el expolio de materialees al que venía siendo sometido desde el siglo XVII hasta bien entrado el XX convirtieron esta majestuosa obra de ingeniería civil en unas
ruinas románticas.
Descripción:
Actualmente se conservan los restos de seis pilares de los ocho que tuvo originalmente el
monumento, así como el arco comprendido entre los pilares nº4 y 5, el cual es objeto de consolidación y restauración desde el año 2020 dentro de los trabajos previstos en el Proyecto Royales. Las cepas del conjunto de los pilares han sido asimismo localizadas en el cauce actual del Pisuerga en labores de prospección durante el estiaje. Además de los restos de la
fábrica del puente los trabajos arqueológicos han permitido localizar y documentar la vanguardia occidental del puente que protegía al mismo y al hospital contiguo de las fuertes avenidas del Pisuerga, se trata de un muro en mampostería de más de 300 metros de longitud paralelo al cauce antiguo del
río. Se han localizado asimismo los restos de algunas aceñas y presas de probable cronología medieval, cuyo estudio se haya en curso.
Del Real Hospital de San Pedro de Royales no quedan sino algunos vestigios en los márgenes de los terrenos colindantes al puente, probablemente arrastrados por la maquinaria que allanó esos terrenos en el siglo XX.