Son cincuenta años los que se cumplieron el pasado 5 de julio del descubrimiento de la villa romana de la Olmeda en este municipio. Fue descubierta fortuitamente por Javier Cortes Álvarez de Miranda cuando se tropezó con los restos de una vieja pared mientras realizaba faenas agrícolas en la finca de su propiedad; un hito relevante que le llevó a la investigación arqueológica por su cuenta y que tras 12 años de intenso trabajo, en 1980, donó a la Diputación de Palencia, quien continuó la labor y que ha evolucionado con importantes inversiones, como la construcción del edificio moderno y bien museizado para albergar los restos y para poder contemplar la belleza de los mosaicos y estancias de la villa.