No me extraña que Santi y la gente de Salinas les guste el lugar. Es idóneo para meditar, ¡Hay tantos así en la provincia de Palencia!.
Yo solía, en el pueblo de mi madre, (Congosto de Valdavia) irme a la orilla del río, y con un buen libro se oía el murmurar de las hojas de los chopos y llegaba a quedarme dormido, hsta que me despertaba rodeado de vacas.
¡Pobres, cómo se asustaban de verme correr!.
Ya me decían no corras que la Paloma ó Majita (que eran los nombres que les ponían mas habituales) no hacen nada pero por si acaso.
Como bien dices Charo, es bonito en el silencio de un valle oir saltar las truchas, oir el canto de los pájaros y el ruido de la corriente del río.
¡Como buscamos esto cuando salimos de las grandes ciudades!
Para todos mis felicidades Charo, Santi Peter, El Emigrao, que ya hablaremos también de la zona Andaluza que tiene su encanto, sobre todo Isla Cristina, Chiclana etc.
Eduardo.
Yo solía, en el pueblo de mi madre, (Congosto de Valdavia) irme a la orilla del río, y con un buen libro se oía el murmurar de las hojas de los chopos y llegaba a quedarme dormido, hsta que me despertaba rodeado de vacas.
¡Pobres, cómo se asustaban de verme correr!.
Ya me decían no corras que la Paloma ó Majita (que eran los nombres que les ponían mas habituales) no hacen nada pero por si acaso.
Como bien dices Charo, es bonito en el silencio de un valle oir saltar las truchas, oir el canto de los pájaros y el ruido de la corriente del río.
¡Como buscamos esto cuando salimos de las grandes ciudades!
Para todos mis felicidades Charo, Santi Peter, El Emigrao, que ya hablaremos también de la zona Andaluza que tiene su encanto, sobre todo Isla Cristina, Chiclana etc.
Eduardo.