Poco a poco voy realizando mi organización laboral y domicilial.
En medio de ello, me dispongo a agradecerte la bienvenida que me otorgas, Charo, y os expreso tanto a tí como a Rubí que os encontreis bien, así como al resto de los foráneos.
Aunque cuesta reincorporarse, despues de visitar tierras preciosas, tanto a un lado como a otro, de la Cordillera Cantábrica, pero hay que seguir el rumbo marcado.
En los distintos lugares que he visitado, Charo, me hacían recordar tus vivencias por aquellos parajes, porque son dignos de que los disfruten todas las personas que amamos la Naturaleza, sólamente así, podemos amar la Montaña Palentina por lo que nos toca, y regiones circundantes.
Yo disfruté, a pesar de no hacer muy buen tiempo, en detrimento de mi esposa que esperaba tener más tiempo de playa, pero la convivencia con personas entrañables de Granada, Sevilla, La Rioja, León, etc. etc., ha hecho posible disfrutar de las distintas maravillas que nos ofrecen tanto Cantabria como Palencia.
Es bonito ver el verdor de la zona donde sus rios desembocan en el Mar Cantábrico, y la zona de este lado de las montañas cuyos rios y verdor compiten en belleza; y ahí se me han situado los recuerdos tuyos más intensos en mi ir y venir junto al Pisuerga, pleno de agua que llegaba hasta el borde de sus riberas, y que no desmerece en caudal al Duero en donde van a parar sus aguas junto al Carrión y otros afluentes y subafluentes.
En fin han sido pocos días pero intensos, lo cual te indica que ha valido la pena ir.
Espero disponer de más tiempo, y ver de nuevo los comentarios de Santi, Peter, Emigrao..., que echamos de menos, y mientras os envío un fuerte abrazo de bienllegado.
Eduardo.
En medio de ello, me dispongo a agradecerte la bienvenida que me otorgas, Charo, y os expreso tanto a tí como a Rubí que os encontreis bien, así como al resto de los foráneos.
Aunque cuesta reincorporarse, despues de visitar tierras preciosas, tanto a un lado como a otro, de la Cordillera Cantábrica, pero hay que seguir el rumbo marcado.
En los distintos lugares que he visitado, Charo, me hacían recordar tus vivencias por aquellos parajes, porque son dignos de que los disfruten todas las personas que amamos la Naturaleza, sólamente así, podemos amar la Montaña Palentina por lo que nos toca, y regiones circundantes.
Yo disfruté, a pesar de no hacer muy buen tiempo, en detrimento de mi esposa que esperaba tener más tiempo de playa, pero la convivencia con personas entrañables de Granada, Sevilla, La Rioja, León, etc. etc., ha hecho posible disfrutar de las distintas maravillas que nos ofrecen tanto Cantabria como Palencia.
Es bonito ver el verdor de la zona donde sus rios desembocan en el Mar Cantábrico, y la zona de este lado de las montañas cuyos rios y verdor compiten en belleza; y ahí se me han situado los recuerdos tuyos más intensos en mi ir y venir junto al Pisuerga, pleno de agua que llegaba hasta el borde de sus riberas, y que no desmerece en caudal al Duero en donde van a parar sus aguas junto al Carrión y otros afluentes y subafluentes.
En fin han sido pocos días pero intensos, lo cual te indica que ha valido la pena ir.
Espero disponer de más tiempo, y ver de nuevo los comentarios de Santi, Peter, Emigrao..., que echamos de menos, y mientras os envío un fuerte abrazo de bienllegado.
Eduardo.