Buenas tardes:
¡Más que gratificante Emigrao!... ha sido un viaje soñado durante demasiado tiempo. Pero ha sido ahora cuando al fin he podido volver.
Sí que ha habido cambios, ¡claro que sí! pero no significativos. Estas piedras que conforman el recinto exterior de la iglesia parroquial de Salinas, son las mismas. No así el pavimento. La calle, esta por poner alguna, está tal cual, como si se hubiera detenido el tiempo. Al fondo está la plaza, la zona donde se concentra todo el quehacer cotidiano. ¿No te digo?... todo igual, como nos lo muestra Contreras en esta bonita fotografía.
Un saludo Emigrao, y a todos/as.
¡Más que gratificante Emigrao!... ha sido un viaje soñado durante demasiado tiempo. Pero ha sido ahora cuando al fin he podido volver.
Sí que ha habido cambios, ¡claro que sí! pero no significativos. Estas piedras que conforman el recinto exterior de la iglesia parroquial de Salinas, son las mismas. No así el pavimento. La calle, esta por poner alguna, está tal cual, como si se hubiera detenido el tiempo. Al fondo está la plaza, la zona donde se concentra todo el quehacer cotidiano. ¿No te digo?... todo igual, como nos lo muestra Contreras en esta bonita fotografía.
Un saludo Emigrao, y a todos/as.