SAN JORDE DE OJEDA: Los campos se cuidan con esmero. Cuando ya se ha recogido...

Los campos se cuidan con esmero. Cuando ya se ha recogido la cosecha, el tractor con su arado prepara la tierra para la próxima cosecha. No se piede el tiempo. La iglesia erománica, sin embargo, ahí está, sola y abandonada a merced de los depredadores. No tiene amo que la vigile ni paisano que la cuide para mantenerse en pie.