Charo, me gustó mucho hablar contigo, me pareciste una estupenda persona, como ya me lo parecias por aquí, es tan bonito pasearse en compañia por nuestra niñez, que hay momentos que te acuerdas y no se lo puedes como tu dices contar ni a los hijos, ya que ellos no pueden en estos momentos entender que su madre lo poco que sabe fué en los dos o tres primeros años de escuela, ya que luego fuí en días alternos unas veces porque era la mayor, y tenía que cuidar de los demás y otras por el mal tiempo ya que los inviernos nevaba mucho y desde el caserio no podíamos ir, a si que solo sabemos, para medio valernos, y eso que yo tenía muchas ganas de aprender, luego con los niños que cuidaba aprendí un poco y otro poco con mis hijos lo cual ellos no quisieron estudiar ninguno de los dos