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SIEMPREVIVAS
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En un correo anterior, os comento que la casa donde nací lo edificado en la esquina, en su origen eso era todo una tapia. El patio era tan grande, que no solo había ésta. Una de ellas, la divisoria de la casa colindante de los Henares rematada con tejas.
La que daba a la calle, que era por donde se descargaba la leña lanzándola por encima, aquí no había tejas.
Como estaba hecha de adobe y daba a la carretera, mi padre prefería hacer un rebozado de restauración más amenudo y no poner tejas.
Para protejerla de la erosión, recurria a esta planta silvestre llamada siempreviva. Remataba la pared con una capa de tierra donde sembraba esta planta, poniendolas salteadas por todo lo ancho y largo de la pared, pero no muy distanciada una de otra.
Esta planta tiene una incrible capacidad de adaptación a temperaturas extremas, se reproducen fácilmente y sus raices son finas pero abundantes, llegando a llenarse toda la superficie que hacía de protección, contra el temporal. Actualmente, esto ha quedado relegado para la historia.
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En un correo anterior, os comento que la casa donde nací lo edificado en la esquina, en su origen eso era todo una tapia. El patio era tan grande, que no solo había ésta. Una de ellas, la divisoria de la casa colindante de los Henares rematada con tejas.
La que daba a la calle, que era por donde se descargaba la leña lanzándola por encima, aquí no había tejas.
Como estaba hecha de adobe y daba a la carretera, mi padre prefería hacer un rebozado de restauración más amenudo y no poner tejas.
Para protejerla de la erosión, recurria a esta planta silvestre llamada siempreviva. Remataba la pared con una capa de tierra donde sembraba esta planta, poniendolas salteadas por todo lo ancho y largo de la pared, pero no muy distanciada una de otra.
Esta planta tiene una incrible capacidad de adaptación a temperaturas extremas, se reproducen fácilmente y sus raices son finas pero abundantes, llegando a llenarse toda la superficie que hacía de protección, contra el temporal. Actualmente, esto ha quedado relegado para la historia.
rosa esas plantas eran un seguro por si alguien deseaba saltar la tapia, otros ponian cristales encustrados en el cemento,, pues yo con las celula hice torrijas y me puse hacer horejuelas, con la ayuda de marido y nieta, no estaban mal,, las hice por ver, vi una receta y intentamos hacerlas, pero me da que no repito,, besos y aqui sigo haciendo ejecicios con mi brazo para recuperarlo