Hablando de berros, yo también los como a la salida del
invierno. Los cojo en un
pueblo de la
Sierra de Albarracín, en el nacimiento de un arroyo. Como dato curioso diré que soy el único que los coje, ya que no había
costumbre en el pueblo. Son iguales que los de Tabanera. De hecho al comerlos siempre lo nombro a nivel familiar.
Un abrazo a todos.
Mariano.