El
coro alto en el segundo tramo de la nave central, tras la
torre vieja, se construyó en estilo
gótico florido del siglo XV. Su estructura se apoya sobre
columnas decoradas con temas vegetales que a su vez soportan
arcos escarzanos. Dichos arcos están decorados con racimos y hojas de parra como corresponde a la tradicional simbología cristiana. A un lado y al otro del coro están esculpidas exentas las figuras de 11 apóstoles (falta 1 en el acceso al coro), en
piedra, apoyadas en ménsulas y rematadas con doseletes. A sus costados hay ángeles tenantes que sujetan los
escudos de
Castilla y León, como símbolo de la batalla de Tamarón (1037). En el frente la decoración es menos profusa; presenta una Anunciación y un Dios Padre en el centro en actitud de bendecir, y ángeles con los correspondientes escudos de Castilla y León. El sotocoro tiene
bóveda estrellada y su clave está adornada con un
escudo de los Reyes Católicos. Se sube al rellano del coro por una
escalera de caracol pegada a una
columna.