Desearía un pueblo alegre, vivo, con todas sus calles y callejas llenas de niños jugando a los cartones o a las canicas como antaño, con el colegio repleto en todas sus aulas, y las eras llenas a la salida del cole para jugar al balon, desearía ver la hermosa plaza que tenemos llena de gente, con la biblioteca ocupada como en los tiempos del señor julio, un pueblo con todas las casas habitadas, con las bodegas abiertas a la hora de merendar, con las huertas del requejo llenas de hortelanos , con el prado lleno de caballos pastando y galopando en libertad, .