¡Esto se anima!
Por avanzar en el ‘Día del Torquemadense exiliado’ podríamos ir proponiendo fechas y posibles expectativas que nos apeteciera incluir. Yo pienso que cada uno de los interesados en tal evento podríamos sugerir hasta tres posibles en el 2013, indicando consideraciones que las hagan más gratas, aprovechables y dignas de recordar. Valdesalce, comida, bailongo, acto oficial del/en el Ayuntamiento, un paseo hasta el rabo del puente o, ¡qué coña!, hasta la estación si es preciso y hace buen tiempo, …
Yo por mi parte propongo la Semana Santa - Pascua, la Virgen de Agosto o San Mateo.
Hablando de la estación, por aquellos tiempos mi tío Satur (más tarde –creo- conocido por ‘Barrigón’) hacía el servicio de recogida y entrega de la saca de Correos al Tren Correo. Iba con una tartana o algo equivalente llevada por una caballería y también recogía viajeros que venían en el tren, aunque naturalmente también los llevaba desde el pueblo si alguno se lo pedía. Más tarde, llegué a ver en su corral un carruaje más elegante –como él lo era- pero ya no llegué a montar en él.
Don Simón –efectivamente era practicante graduado en la Universidad de Valladolid-, era también tío mío por casamiento con mi tía Mercedes. ¡Cuántas veces he estado en su casa y –lógicamente- en la barbería! ¡Y cuántas veces he visto a los clientes agacharse a recoger la perra gorda –creo- incrustada en una de las baldosas que pusieron en una remodelación que hicieron del establecimiento, acto acompañado siempre de unas risas y sanos comentarios de los clientes presentes y los oficiales de la barbería (tu padre, mi primo Mari, …).
Supongo que la baldosa procedía del Casero, José el Gallego, industrial incansable que también tenía en el mismo edificio del Arrabal la fábrica de gaseosas de la marca Casera). Su hija Mari fue mi primera ‘novia’ a la tierna edad de uno, dos o tres años. (No recuerdo como es natural la fecha exacta del compromiso. Y … se casó con otro.)
El nuevo origen de ‘rabudo’ me gusta más, pero es demasiado fino y propio del pueblo como para que los Villamediana lo usaran con ánimo de ofender. Lo de “el Canene" podría tener más sentido, pero eso ¿cuándo fue? Mila, ¿tu sabes algo de esto?
Un abrazo a todos los 'exiliados' por circunstancias ajenas al cariño que sentimos por nuestro pueblo.
Por avanzar en el ‘Día del Torquemadense exiliado’ podríamos ir proponiendo fechas y posibles expectativas que nos apeteciera incluir. Yo pienso que cada uno de los interesados en tal evento podríamos sugerir hasta tres posibles en el 2013, indicando consideraciones que las hagan más gratas, aprovechables y dignas de recordar. Valdesalce, comida, bailongo, acto oficial del/en el Ayuntamiento, un paseo hasta el rabo del puente o, ¡qué coña!, hasta la estación si es preciso y hace buen tiempo, …
Yo por mi parte propongo la Semana Santa - Pascua, la Virgen de Agosto o San Mateo.
Hablando de la estación, por aquellos tiempos mi tío Satur (más tarde –creo- conocido por ‘Barrigón’) hacía el servicio de recogida y entrega de la saca de Correos al Tren Correo. Iba con una tartana o algo equivalente llevada por una caballería y también recogía viajeros que venían en el tren, aunque naturalmente también los llevaba desde el pueblo si alguno se lo pedía. Más tarde, llegué a ver en su corral un carruaje más elegante –como él lo era- pero ya no llegué a montar en él.
Don Simón –efectivamente era practicante graduado en la Universidad de Valladolid-, era también tío mío por casamiento con mi tía Mercedes. ¡Cuántas veces he estado en su casa y –lógicamente- en la barbería! ¡Y cuántas veces he visto a los clientes agacharse a recoger la perra gorda –creo- incrustada en una de las baldosas que pusieron en una remodelación que hicieron del establecimiento, acto acompañado siempre de unas risas y sanos comentarios de los clientes presentes y los oficiales de la barbería (tu padre, mi primo Mari, …).
Supongo que la baldosa procedía del Casero, José el Gallego, industrial incansable que también tenía en el mismo edificio del Arrabal la fábrica de gaseosas de la marca Casera). Su hija Mari fue mi primera ‘novia’ a la tierna edad de uno, dos o tres años. (No recuerdo como es natural la fecha exacta del compromiso. Y … se casó con otro.)
El nuevo origen de ‘rabudo’ me gusta más, pero es demasiado fino y propio del pueblo como para que los Villamediana lo usaran con ánimo de ofender. Lo de “el Canene" podría tener más sentido, pero eso ¿cuándo fue? Mila, ¿tu sabes algo de esto?
Un abrazo a todos los 'exiliados' por circunstancias ajenas al cariño que sentimos por nuestro pueblo.