Buenas tardes Soledad: Hacía un montón de tiempo que por razones personales no entraba en ésta bonita y enriquecedora web, disculpamé.
No, no era el señor Cayo, mi padre se llamaba Ignacio y mi madre Lucía, desafortunadamente ya no están con nosotros. Eramos un montón de hermanos, entonces cuando falleció mi hermanita Mª Jesus con sólo ocho mesitos de vida eramos cinco, al final llegamos a ser ocho.
La muerte de esa hermana mia marcó al pueblecito de Vado y lo sintieron todos como si de un familiar suyo se tratara... ¡y es que en Vado las personas se ocupaban unas de otras, eramos como una gran familia!.
Hoy todo es distinto en todas partes, tambien en Vado, que duda cabe. Pero puedo asegurarte que el pueblo nos marcó positivamente a todos los miembros de nuestra humildísima familia. Recuerdo como nota muy especial el hecho de una gran nevada que dejó a Vado completamente incomunicado, no se podía salir practicamente de las casas hasta que el señor alcalde tocó a huebra para hacer accesible el trayecto a la igulesia, a la fuente y a la escuela. Salir de Vado fué practicamente imposible, durante varios dias, hasta que llegó una máquina quitanieves. No obstante todo el mundo se ocupó de que nadie careciese de los alimentos primarios.
Un agradecido saludo Soledad por contestar.
No, no era el señor Cayo, mi padre se llamaba Ignacio y mi madre Lucía, desafortunadamente ya no están con nosotros. Eramos un montón de hermanos, entonces cuando falleció mi hermanita Mª Jesus con sólo ocho mesitos de vida eramos cinco, al final llegamos a ser ocho.
La muerte de esa hermana mia marcó al pueblecito de Vado y lo sintieron todos como si de un familiar suyo se tratara... ¡y es que en Vado las personas se ocupaban unas de otras, eramos como una gran familia!.
Hoy todo es distinto en todas partes, tambien en Vado, que duda cabe. Pero puedo asegurarte que el pueblo nos marcó positivamente a todos los miembros de nuestra humildísima familia. Recuerdo como nota muy especial el hecho de una gran nevada que dejó a Vado completamente incomunicado, no se podía salir practicamente de las casas hasta que el señor alcalde tocó a huebra para hacer accesible el trayecto a la igulesia, a la fuente y a la escuela. Salir de Vado fué practicamente imposible, durante varios dias, hasta que llegó una máquina quitanieves. No obstante todo el mundo se ocupó de que nadie careciese de los alimentos primarios.
Un agradecido saludo Soledad por contestar.