Durante el paso del tiempo, las clases populares de Valdecañas de Cerrato, y alrededores, han desarrollado su propia jerga local, en la cual, algunos de sus términos difieren en significado con sus semejantes en otras provincias.
Se puede comprobar que en muchos casos, las frases y vocablos, se alargan a modo de cierto «cante», en la penúltima sílaba. Ejemplo: «Abu... ulto».