Estoy de acuerdo en que uno nunca se debe de alegrar de las desgracias ajenas, pero si bien es cierto que mucha gente cuando habla de los demas lo que suele hacer es dañar no ayudar, por ello mi opinion es que si no se va ayudar, nadie somos quienes para criticar ni juzgar a nadie y si hay alguien esta libre de pecado que tire la primera
piedra. Vivamos y dejemos vivir. Siempre hay un por que.