Buenos días, 14º con cielo despejado y sin viento, el termómetro sube sin pausa, seguimos con el a la sombra del acebo, el día que nos espera... magnífico, anoche los amigos insistiendo en cenar en la calle y nosotros ¡que no, que no! el fresquito era más que evidente, ni chaqueta ni gaitas, no es posible disfrutar de una cena estupenda notando como más-que-fresco se instala en tu nariz, al final cenamos como reyes en casa, agradable y como digo siempre estos ratos valen su peso en oro, espero que ... (ver texto completo)