Cuento: Caperiucita Roja y el Lobo- Cuentos en verso por Roald Dahl
Cuentos en verso para niños perversos
Estando una mañana haciendo el bobo
le entró un hambre espantosa al Señor Lobo,
así que, para echarse algo a la muela,
se fue corriendo a casa de la Abuela.
¿Puedo pasar, Señora?, preguntó.
La pobre ancíana, al verlo, se asustó...