Nos vamos a Guardo, unas cervecitas y unas compras nada importante, luego cena con amigos, seré feliz como perdiz en época de veda, charla, risas, compartir o disentir de opiniones, lo mismo peli, bebercio y trasnoche, ¡esto es vida y si no, que se lo cuenten a Adán! envidia pura... destilaría por sus poros. un saludo.