Hola Antonio un placer conversar contigo, ¿todo el norte eh?, pues esto es norte y no te hemos visto por aquí, algún pajarito me comentó que pasasteis a horas de andar búhos, ¡claro a esas horas solo ellos y pocos más están activos! jajajaja...., si las maletas es un artilugio con muy mala sombra, en cuanto te descuidas encogen.. pero me has traído a mi mente, las mochilas, los sacos, ¡ay que tiempos aquellos!, donde nos marchábamos a lugares recónditos con pinta de llevar no una... tres por lo menos tres casas a cuestas, las marchas, cosas que atesoro en mi memoria. Ayudar palabra mágica que trae agradecimientos de " cola", si se pone un poco de ayuda de cada uno, las tares no cuestan, o al menos se hacen más soportables, hasta que todo queda colocado y empaquetado ¡madre que lio!, recuerdo sacudir la tienda, quitar arena, y demás, limpiar los sacos, airear para evitar oler a vaya-usted-a-saber-a-que, ropas especiales de abrigo que hay que revisar... ¡ya estoy cansada!, bueno si se toma con tranquilidad mejor, el problema es que queremos quitar de en medio todo el batiburrillo cuanto antes, y es una buena paliza.
Iré a Brañosera en breve, un paseo por allí, un poco de sendero-montañero, suave, sin demasiado esfuerzo, tengo mucho cariño a mi espalda y la necesito libre de dolencias, iremos hasta El Golobar, y quizá hasta el caño que sigo sin saber como se llama.
Por tu entrada seguro que ha sido todo un disfrute y eso vale más de lo que se pueda contabilizar, aquí seguimos anclados los de vacaciones tardías... ¡que lo vamos a hacer!, no tengo queja alguna, soy de sombra y sol suave, poco calor y menos moscas, ayer creí que nos comían, ¡pesadas, pesadísimas!.
Me alegro de poder saludarte, como siempre los saludos son gratificantes, y el deseo de tener mucha salud va unido.
Iré a Brañosera en breve, un paseo por allí, un poco de sendero-montañero, suave, sin demasiado esfuerzo, tengo mucho cariño a mi espalda y la necesito libre de dolencias, iremos hasta El Golobar, y quizá hasta el caño que sigo sin saber como se llama.
Por tu entrada seguro que ha sido todo un disfrute y eso vale más de lo que se pueda contabilizar, aquí seguimos anclados los de vacaciones tardías... ¡que lo vamos a hacer!, no tengo queja alguna, soy de sombra y sol suave, poco calor y menos moscas, ayer creí que nos comían, ¡pesadas, pesadísimas!.
Me alegro de poder saludarte, como siempre los saludos son gratificantes, y el deseo de tener mucha salud va unido.