De mi permanencia en
Villarramiel recuerdo la siguiente vivencia: mi tío Baltasar pescaba ranas en la ría y que mi tía Angela guisaba muy ricas. Un día se llevó a un primo mío en la bici y yo, que era muy pequeño, no fui. La conclusión es que mi primo me contó maravillas y al día siguiente nos escapamos los dos.
Carretera adelande y con un calor de desierto.Cuando llegamos a la ría yo no podía más y, enfurruñado, le dije a mi primo que si no me daba
agua no seguía. Preguntamos a unos hombres que estaban
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