Aviñante siempre ha sido para mí, el
pueblo más bonito de
España.
Siempre ha estado sobrado de
agua, y ésta corría por la
calles, y era agua pura, debido a los varios manantiales que surgen de las
montañas. Yo estuve en la
escuela de niño en Aviñante, mi maestro se llamaba Don Enrique y el cura Don Jesús, no puedo comprender esta triste situación de la problemática del agua en unos
pueblos donde creo que es abundate. Que ponga quien tenga que poner, los debidos remedios, porque yo pienso volver
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