Rodeado de paramos, un pequeño
valle, llamado
Villodre a su lado un diminuto
rio, como un hilo de seda en un vestido un poco envejecido pero que guarda su frescura, dulzura e ilusión por vivir.
Es la tierra de mis abuelos maternos, ellos siempre estaban alli, ¿sera que la paz de Villodre es adictiva?¿sera como respirar tranquila, la mañana del sabado, cuando te despiertan los rayos del sol?
El
pueblo de lejos parece que esta acurrucado, no por frio, sino para protegerse y apoyarse, unos a otros,
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