Siempre tuvieron fama los peces que se pencaban en el Tormes en la zona de Alba; existían bares en el pueblo donde se podían comer exquisitamente preparados, e incluso se vendían en la capital provincial. A la vez, esa actividad pesquera, era sustento de algunas familias que comercializaba los Peces conseguidos en el río. Todo aquello prácticamente ha desaparecido.