El despoblamiento que sufren los pueblos da como resultado el abandono de inmuebles que en otro tiempo estaban llenos de vida. Edificaciones bonitas, proporcionales y apropiadas para el uso que les darían sus moradores. De fuertes paredes y ventanas en las mismas que dieran luz a su interior. Sin embargo, el paso del tiempo, la carencia de las consiguientes labores de mantenimiento y las inclemencias del clima acabarán con esta y otras similares en el suelo. A la de la fotografía le falta la cubierta, lo que quiere decir que se moja y se pudrirán sus vigas de madera y, con el tiempo, será una ruina a sumar a otras tantas.