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CUASI BREVE DESCRIPCIÓN PERSONAL DE COMPULSIVOS PREDADORES DE IDEAS.-GÉNERO Y FAMILIA DE LOS COPIADOR ES Y PEGADORES DE DOCUMENTOS Y ESCRITOS.
OBSERVACIONES:- Especie de difícil exterminio por su camaleónica costumbre de cambiar de color según las circunstancias y condiciones más favorables a sus necesidades vitales.
Misterioso y enigmático personaje de doble y ambigua personalidad, que cual enmascarado y depredador “zorro”,-- hermano “zorro” diría el seráfico SAN FRANCISCO DE ASÍS--, ¡qué paradoja! digo yo, vaga y campa a sus anchas por los campos y predios de los foros de Aldeaseca devorando, robando, saqueando y destrozando ideas y pensamientos ajenos, sin control, sin orden, sin sentido ni concierto, amparado y protegido por su socorrido antifaz o máscara del anonimato y que, así mismo, cual “vampírico y fantasmal Drácula”, sediento y ambicioso de ideas ajenas, sale embozado en su negra capa de su lúgubre, fúnebre, lóbrego y obscuro sepulcro en busca de cuellos tiernos, inocentes y sonrosados de víctimas indefensas donde, buscando la soledad y complicidad de la noche, hincar sus dientes para chupar y mendigar con voraz, sediento, angustioso y perturbador deseo el alimento que le procure la subsistencia vital y el mantenimiento de la normal racionalidad por carencia total y absoluto desamparado de planteamientos, juicios, reflexiones y opiniones propios, producido por agotamiento íntegro, si alguna vez existió, del manantial creativo de ideas y pensamientos que debiera fluir de su presunto e inexistente intelecto, de su hueco y vacio magín y de su improductiva y yerma creatividad, dentro, todo ello, de la sencilla y humilde condición de la comunicación, relación y transmisión sociales y humanas, sin alharacas, ostentaciones, magnificencias y exageradas demostración de afectados sentimientos, acontecimientos y hechos. Podría continuar ad infinítum y hasta el agotamiento haciendo similitudes de la personalidad del “COMPULSIVO COPIADOR Y PEGADOR DESCONOCIDO”, pero el fin y objeto de su anormal comportamiento me ocasiona y produce dificultad para hallar una explicación y comprensión lógicas, diferentes a las ya expuesta más arriba. No obstante consultaré con etólogos experimentados que me descifren estas conductas y estos modos de comportamiento de semejante diversidad de fauna humana.
Creo que era OSCAR WILDE que dijo aquello de que “NO EXISTEN MÁS QUE DOS REGLAS PARA ESCRIBIR: TENER ALGO QUE DECIR Y DECIRLO”. Y “EL COMPULSIVO COPIADOR Y PEGADOR DESCONOCIDO” no tiene nada que decir por carencia de intuición, imaginación y ausencia de recuerdos y vivencias. Posiblemente no tuvo infancia ni juventud, y por ello, huérfano y desamparado de ellas, vagabundo y errático limosnea algo que llevarse a la hambrienta boca de su cerebro y mollera donde moran,--y en EL COMPULSIVO COPIADOR Y PEGADOR DESCONOCIDO no es el caso--, el juicio, la razón, la agudeza, el ingenio, la memoria, los recuerdos vividos, el discernimiento, la comprensión, la lucidez, el razonamiento deductivo, etc. etc. y sobre todo el respeto y la consideración a los demás.
CONCLUSIÓN
A tenor de lo expresado y expuesto, EL COMPULSIVO COPIADOR Y PEGADOR DESCONOCIDO tiene graves problemas y dificultades de expresión a través de la escritura y necesita algún cursillo acelerado de técnicas de aprendizaje, su mecánica y métodos pedagógicos de enseñanza y posterior desarrollo de las facultades antes mencionadas, y para ello cualquier forero de Aldeaseca, en acto de humana caridad, está en condiciones óptimas de instruir en tales artes y virtudes, AL COMPULSIVO COPIADOR Y PEGADOR DESCONOCIDO, por muy difícil y laborioso que sea el empeño, como es el caso.
Desconozco si existe algún motivo de reclamación más allá de la simple exhortación al abandono de tales prácticas y recurrir al sentido común ¡qué difícil y complicado! DEL COMPULSIVO COPIADOR Y PEGADOR DESCONOCIDO, pero sí pido al responsable de esta página que si hay algún mecanismo informático que impida este continuo hábito DEL COMPULSIVO COPIADOR Y PEGADOR DESCONOCIDO, que lo ponga en práctica, puesto que considero que son conductas con inclinaciones ofensivas y burlescas. No obstante, a punto de finalizar la época de Carnestolendas, es decir, El Carnaval, tengo la sana esperanza de que se quite la máscara y al entrar en tiempos de meditaciones y penitencias, es decir la Cuaresma, haga en su mismidad y a solas consigo mismo, actos reflexivos de contrición y arrepentimiento y propósito de enmienda de las patochadas y despropósitos cometidos. ¿IMPOSIBLE? No creo, cosas más difíciles se han logrado. Se pueden hacer milagros y maravillas con le mente.
Cuando EL COMPULSIVO COPIADOR Y PEGADOR DESCONOCIDO esté recuperado de sus graves dolencias y de su estado crítico y tenga capacidad de asimilación, le recomiendo que lea “EL CEREBRO DEL REY” de Nolasc Acarín Tusel. Saludos.
¡PAZ Y BIEN!
Paco García Sánchez.- Valladolid (Tiempo de Carnestolendas soleado y frío)
OBSERVACIONES:- Especie de difícil exterminio por su camaleónica costumbre de cambiar de color según las circunstancias y condiciones más favorables a sus necesidades vitales.
Misterioso y enigmático personaje de doble y ambigua personalidad, que cual enmascarado y depredador “zorro”,-- hermano “zorro” diría el seráfico SAN FRANCISCO DE ASÍS--, ¡qué paradoja! digo yo, vaga y campa a sus anchas por los campos y predios de los foros de Aldeaseca devorando, robando, saqueando y destrozando ideas y pensamientos ajenos, sin control, sin orden, sin sentido ni concierto, amparado y protegido por su socorrido antifaz o máscara del anonimato y que, así mismo, cual “vampírico y fantasmal Drácula”, sediento y ambicioso de ideas ajenas, sale embozado en su negra capa de su lúgubre, fúnebre, lóbrego y obscuro sepulcro en busca de cuellos tiernos, inocentes y sonrosados de víctimas indefensas donde, buscando la soledad y complicidad de la noche, hincar sus dientes para chupar y mendigar con voraz, sediento, angustioso y perturbador deseo el alimento que le procure la subsistencia vital y el mantenimiento de la normal racionalidad por carencia total y absoluto desamparado de planteamientos, juicios, reflexiones y opiniones propios, producido por agotamiento íntegro, si alguna vez existió, del manantial creativo de ideas y pensamientos que debiera fluir de su presunto e inexistente intelecto, de su hueco y vacio magín y de su improductiva y yerma creatividad, dentro, todo ello, de la sencilla y humilde condición de la comunicación, relación y transmisión sociales y humanas, sin alharacas, ostentaciones, magnificencias y exageradas demostración de afectados sentimientos, acontecimientos y hechos. Podría continuar ad infinítum y hasta el agotamiento haciendo similitudes de la personalidad del “COMPULSIVO COPIADOR Y PEGADOR DESCONOCIDO”, pero el fin y objeto de su anormal comportamiento me ocasiona y produce dificultad para hallar una explicación y comprensión lógicas, diferentes a las ya expuesta más arriba. No obstante consultaré con etólogos experimentados que me descifren estas conductas y estos modos de comportamiento de semejante diversidad de fauna humana.
Creo que era OSCAR WILDE que dijo aquello de que “NO EXISTEN MÁS QUE DOS REGLAS PARA ESCRIBIR: TENER ALGO QUE DECIR Y DECIRLO”. Y “EL COMPULSIVO COPIADOR Y PEGADOR DESCONOCIDO” no tiene nada que decir por carencia de intuición, imaginación y ausencia de recuerdos y vivencias. Posiblemente no tuvo infancia ni juventud, y por ello, huérfano y desamparado de ellas, vagabundo y errático limosnea algo que llevarse a la hambrienta boca de su cerebro y mollera donde moran,--y en EL COMPULSIVO COPIADOR Y PEGADOR DESCONOCIDO no es el caso--, el juicio, la razón, la agudeza, el ingenio, la memoria, los recuerdos vividos, el discernimiento, la comprensión, la lucidez, el razonamiento deductivo, etc. etc. y sobre todo el respeto y la consideración a los demás.
CONCLUSIÓN
A tenor de lo expresado y expuesto, EL COMPULSIVO COPIADOR Y PEGADOR DESCONOCIDO tiene graves problemas y dificultades de expresión a través de la escritura y necesita algún cursillo acelerado de técnicas de aprendizaje, su mecánica y métodos pedagógicos de enseñanza y posterior desarrollo de las facultades antes mencionadas, y para ello cualquier forero de Aldeaseca, en acto de humana caridad, está en condiciones óptimas de instruir en tales artes y virtudes, AL COMPULSIVO COPIADOR Y PEGADOR DESCONOCIDO, por muy difícil y laborioso que sea el empeño, como es el caso.
Desconozco si existe algún motivo de reclamación más allá de la simple exhortación al abandono de tales prácticas y recurrir al sentido común ¡qué difícil y complicado! DEL COMPULSIVO COPIADOR Y PEGADOR DESCONOCIDO, pero sí pido al responsable de esta página que si hay algún mecanismo informático que impida este continuo hábito DEL COMPULSIVO COPIADOR Y PEGADOR DESCONOCIDO, que lo ponga en práctica, puesto que considero que son conductas con inclinaciones ofensivas y burlescas. No obstante, a punto de finalizar la época de Carnestolendas, es decir, El Carnaval, tengo la sana esperanza de que se quite la máscara y al entrar en tiempos de meditaciones y penitencias, es decir la Cuaresma, haga en su mismidad y a solas consigo mismo, actos reflexivos de contrición y arrepentimiento y propósito de enmienda de las patochadas y despropósitos cometidos. ¿IMPOSIBLE? No creo, cosas más difíciles se han logrado. Se pueden hacer milagros y maravillas con le mente.
Cuando EL COMPULSIVO COPIADOR Y PEGADOR DESCONOCIDO esté recuperado de sus graves dolencias y de su estado crítico y tenga capacidad de asimilación, le recomiendo que lea “EL CEREBRO DEL REY” de Nolasc Acarín Tusel. Saludos.
¡PAZ Y BIEN!
Paco García Sánchez.- Valladolid (Tiempo de Carnestolendas soleado y frío)