LA “GITANÁ”
Pues, efectivamente, Fely, el día de la “gitaná” era el Martes de Carnaval.
Los mozos de ambos sexos, vestidos con harapos, ropajes e indumentarias a semejanza, modos y usos gitanos, cuantos más desaliñados y estrafalarios posibles que realzasen su adquirida y simulada gitana personalidad, mejor, con gran escenificación e interpretación en las distintas modalidades y peculiaridades gitaneras, no faltando para ello, completando el elenco de “comparsa” y figurantes, los sufridos y sumisos burros ataviados para la ocasión con vistosos arreos y atalajes, con agitanado, garboso y gallardo jinete a sus lomos o enganchados a los familiares “chirris” lleno de pasajeros cañí.
-Alegrando al pueblo con contagiosas algarabía y gritería y con sus pintorescos atuendos, recorrían el pueblo de esta guisa demandando colaboración a los vecinos para que, con sus aportaciones en forma de donativos gastronómicos, --productos de la matanza, legumbres, hortalizas, etc.--, o pecuniarios, amén de las contribuciones propias, componer y preparar el condumio.
-Con todos los componentes necesarios para el guiso correspondiente, en la zanja que separa la era de “La fuente”, hoy dedicada a zona de ocio y deportiva, y lo que era la granja de D. Andrés Gavilán, era el lugar elegido para prepara el fuego necesario, la cocina campestre y natural, donde con los utensilios idóneos,--cazuelas, sartenes, trébedes, perolas, potas--, se guisaba las viandas, que humeantes, inundaban de sabrosos y estimulantes olores el pueblo, con la expectante contemplación excitada y admirada de la revoltosa chiquillería. Allí, tendidos en el verde césped, en campestre reunión degustaban con juvenil, festivo y jovial placer, los ricos guisos, para al caer la tarde, completar la fiesta con la sesión de baile en la plaza o en el salón del Ayuntamiento.
-Relatado según mis personales recuerdos.
-Otra de las muchas costumbres para la historia o para el recuerdo. Saludos
¡PAZ Y BIEN!
Paco García Sánchez.- Valladolid (Con calor el día de la festividad de la Comunidad)
Pues, efectivamente, Fely, el día de la “gitaná” era el Martes de Carnaval.
Los mozos de ambos sexos, vestidos con harapos, ropajes e indumentarias a semejanza, modos y usos gitanos, cuantos más desaliñados y estrafalarios posibles que realzasen su adquirida y simulada gitana personalidad, mejor, con gran escenificación e interpretación en las distintas modalidades y peculiaridades gitaneras, no faltando para ello, completando el elenco de “comparsa” y figurantes, los sufridos y sumisos burros ataviados para la ocasión con vistosos arreos y atalajes, con agitanado, garboso y gallardo jinete a sus lomos o enganchados a los familiares “chirris” lleno de pasajeros cañí.
-Alegrando al pueblo con contagiosas algarabía y gritería y con sus pintorescos atuendos, recorrían el pueblo de esta guisa demandando colaboración a los vecinos para que, con sus aportaciones en forma de donativos gastronómicos, --productos de la matanza, legumbres, hortalizas, etc.--, o pecuniarios, amén de las contribuciones propias, componer y preparar el condumio.
-Con todos los componentes necesarios para el guiso correspondiente, en la zanja que separa la era de “La fuente”, hoy dedicada a zona de ocio y deportiva, y lo que era la granja de D. Andrés Gavilán, era el lugar elegido para prepara el fuego necesario, la cocina campestre y natural, donde con los utensilios idóneos,--cazuelas, sartenes, trébedes, perolas, potas--, se guisaba las viandas, que humeantes, inundaban de sabrosos y estimulantes olores el pueblo, con la expectante contemplación excitada y admirada de la revoltosa chiquillería. Allí, tendidos en el verde césped, en campestre reunión degustaban con juvenil, festivo y jovial placer, los ricos guisos, para al caer la tarde, completar la fiesta con la sesión de baile en la plaza o en el salón del Ayuntamiento.
-Relatado según mis personales recuerdos.
-Otra de las muchas costumbres para la historia o para el recuerdo. Saludos
¡PAZ Y BIEN!
Paco García Sánchez.- Valladolid (Con calor el día de la festividad de la Comunidad)