Que penúria pasaban las mujeres en el año 1953 para lavar la ropa, pues tenían que desplazarse al regato, y no veáis en el
invierno con aquellas
heladas lo primero que hacían nada más llegar era romper el carámbano con una
piedra si querían lavar a pesar del
aguas tan fría, pero bueno era lo que había. Después ponían el
lavadero y la tajuela y dale que pego; pues no creais después de todo empezaban a charlar y a contarse sus penas de como habían pasado el fin de semana, de que si fulano salía con
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