Ofertas de luz y gas

BARBADILLO: Desde mediados del S. X, la monarquía leonesa, con...

Desde mediados del S. X, la monarquía leonesa, con la colaboración del obispo de León y otros magnates leoneses, realizan los primeros intentos de incluir en la órbita cristiana las vegas centrales del Tormes, posiblemente atraído por el aumento demográfico que estaba experimentando toda la zona y que permanecía al margen del dominio político, tanto cristiano como musulmán.
Posiblemente este hecho y el contrastar el peligro que supone el que los cristianos franqueasen el curso del río Duero hasta los puertos de las montaña centrales, es lo que lleva a Almanzor a organizar repetidas expediciones militares contra el territorio salmantino y varias veces contra la misma ciudad de Salamanca, por lo que la inmigración, al menos durante un tiempo quedaría paralizada, pero pasado el peligro, ésta continuaría.
Como consecuencia de la definitiva conquista cristiana de Toledo, en el año 1.085 se va a producir la sustitución de un enorme espacio fronterizo, posiblemente con mayor población de lo que se había pensado hasta ahora pero totalmente al margen de cualquier control político, que pasa ya a depender política, administrativa y socialmente de los reyes cristianos, en donde se fijará una frontera traspasadas las montañas del Sistema Central, incrementando el proceso colonizador que “anónimos pioneros” han venido realizando. El aumento colonizador que experimentan los territorios salmantinos durante el S. XII y la primera mitad del S. XIII se debió fundamentalmente a la masiva y continuada emigración de comunidades campesinas que darían lugar a las “comunidades de aldea” pequeñas y numerosas que fueron creando grupos familiares que habían abandonados sus lugares de origen, empujados bien por la necesidad o por las ventajas que esperaban encontrar en los territorios fronterizos. Estas comunidades, en donde se alternaba junto con la posesión de carácter familiar, con la capacidad para heredar, donar, vender o cambiar junto con la posesión colectiva del común de moradores de la aldea, se va a convertir en el marco básico de producción y reproducción de la vida social, dando lugar a la creación de unas formas de poder político y organización social relativamente novedosa.
Apuntes sobre H. de Salamanca. 37, Rober