Otros fueros de menor importancia fueron los de Barruecopardo dado por el conde Armengol VII de Urgel, dicho conde y sus caballeros ayudaron a Fernando II de León en la conquista de Alcántara, entre sus curiosidades fija el pago anual de un cahiz de pan la cantidad que han de pagar los vecinos que pasan de diez maravedíes en adelante quedando al arbitrio de los hombres buenos la cantidad que han de pagar los que poseen menos. Se exime del pago de osas (a la mujer que contrae segundas nupcias) y luctosa (si muere un vasallo se paga al señor por la pérdida de mano de obra) la mañería (cantidad que los vasallos pagan como compensación por no tener hijos). La viuda sin hijos que no esté en condiciones de volver a casarse y carecer de bienes no está obligada a pagar fuero…
También existieron Fueros en Arcediano, Negrilla de Palencia y Cantalapiedra, Paradinas y San Cristóbal de la Cuesta, como Cartas Puebla de Sta. Magdalena, San Marcos y Sancti Spíritus en Salamanca provincia.
De los Fueros surgen Ordenanzas Gremiales como las que estuvieron vigentes en la Edad Media para curtidores y zapateros, otra que regulaba la prostitución y una tercera sobre la obligación de pesar correctamente los artículos que se venden en el mercado. Es el inicio de las cofradías y los gremios. Los primeros en organizarse fueron los clérigos, ya en el S. XII se regula que los clérigos han de dar al Obispo la tercera parte de los diezmos que reciban en sus iglesias. Las cofradías de los caballeros e hidalgos tienen por objeto la defensa del reino y como tal se promociona que practiquen juegos de guerra aprovechando las festividades de su santo patrón (torneos, justas, correr la sortija o los caños…). Se fomentan en tiempos de Felipe II anulando la prohibición de correr los toros pues “el llegar al toro les pone orgullo y es en buena manera de ensayo voluntario para no se allar del todo nuevos en los peligros que después en la guerra se ofrecen” con lo que la gente se anima a tener caballos de guerra y se dan medios a la ciudad para que corra con los gastos de tela, trompetas, lanzas, timbales, tambores, pífanos….
De la H. de Salamanca (21)
También existieron Fueros en Arcediano, Negrilla de Palencia y Cantalapiedra, Paradinas y San Cristóbal de la Cuesta, como Cartas Puebla de Sta. Magdalena, San Marcos y Sancti Spíritus en Salamanca provincia.
De los Fueros surgen Ordenanzas Gremiales como las que estuvieron vigentes en la Edad Media para curtidores y zapateros, otra que regulaba la prostitución y una tercera sobre la obligación de pesar correctamente los artículos que se venden en el mercado. Es el inicio de las cofradías y los gremios. Los primeros en organizarse fueron los clérigos, ya en el S. XII se regula que los clérigos han de dar al Obispo la tercera parte de los diezmos que reciban en sus iglesias. Las cofradías de los caballeros e hidalgos tienen por objeto la defensa del reino y como tal se promociona que practiquen juegos de guerra aprovechando las festividades de su santo patrón (torneos, justas, correr la sortija o los caños…). Se fomentan en tiempos de Felipe II anulando la prohibición de correr los toros pues “el llegar al toro les pone orgullo y es en buena manera de ensayo voluntario para no se allar del todo nuevos en los peligros que después en la guerra se ofrecen” con lo que la gente se anima a tener caballos de guerra y se dan medios a la ciudad para que corra con los gastos de tela, trompetas, lanzas, timbales, tambores, pífanos….
De la H. de Salamanca (21)