ECONOMIA AGRARIA. LA EXPLOTACION DE LA TIERRA, EL PRESTIMONIO AGRARIO Y OTROS CONTRATOS.
La economía que se desarrolló en el marco general de la reconquista presenta como características principales en carácter eminentemente agrícola y ganadero, un alcance esencialmente vecinal y un escaso nivel de monetización acorde con la poca frecuencia de las transacciones.
A partir del S. XI un nuevo movimiento mercantil comienza a desarrollarse en relación con el camino de Santiago que se convirtió en una ruta comercial y humana de primer orden a lo largo de la cual proliferarían pujantes núcleos urbanos.
En el S. XIV se da en España una etapa de profunda crisis económica y social motivada por la epidemia de peste negra que, aunque no fuera la única causa, produjo una escasez de mano de obra y una abundancia relativa de tierras con la consiguiente relajación de usos y prestaciones personales propias de los vínculos tradicionales del modo de producción feudal, además del brusco aumento de los precios y de la subida de salarios, del retroceso de la producción agraria y de la caída de las rentas señoriales.
En el reino Astur-leonés-castellano la economía fue en gran parte agraria, girando fundamentalmente en torno a la tierra. El trueque fue la base de las transacciones, siendo la unidad de valor en muchos lugres la oveja y el modio (medida de grano) pues las monedas habían desaparecido prácticamente de la circulación, excepto algunas de plata romanas, francas y árabes.
La ganadería tuvo tanta importancia como la agricultura, los pastos solían ser comunales para los ganaderos de un mismo pueblo y sus vecinos se agrupaban formando asociaciones y manteniendo entre todos un pastor. El lanar adquirió un lugar preferente a partir del S. XII en que se mezcló la raza ovina autóctona con la raza merina procedente de África. Los pastores se constituyeron en gremios, llamadas mestas, que pronto recibieron protección por parte de reyes y señoríos, priorizando sobre los agricultores.
El sector industrial era rudimentario, por regla general cada grupo se autoabastecía de lo necesario. A partir del S. X fueron apareciendo carpinteros, teloneros, etc. El comercio adquirió mayor importancia en la zona mediterránea.
De la H. de los Pueblos. (24)
La economía que se desarrolló en el marco general de la reconquista presenta como características principales en carácter eminentemente agrícola y ganadero, un alcance esencialmente vecinal y un escaso nivel de monetización acorde con la poca frecuencia de las transacciones.
A partir del S. XI un nuevo movimiento mercantil comienza a desarrollarse en relación con el camino de Santiago que se convirtió en una ruta comercial y humana de primer orden a lo largo de la cual proliferarían pujantes núcleos urbanos.
En el S. XIV se da en España una etapa de profunda crisis económica y social motivada por la epidemia de peste negra que, aunque no fuera la única causa, produjo una escasez de mano de obra y una abundancia relativa de tierras con la consiguiente relajación de usos y prestaciones personales propias de los vínculos tradicionales del modo de producción feudal, además del brusco aumento de los precios y de la subida de salarios, del retroceso de la producción agraria y de la caída de las rentas señoriales.
En el reino Astur-leonés-castellano la economía fue en gran parte agraria, girando fundamentalmente en torno a la tierra. El trueque fue la base de las transacciones, siendo la unidad de valor en muchos lugres la oveja y el modio (medida de grano) pues las monedas habían desaparecido prácticamente de la circulación, excepto algunas de plata romanas, francas y árabes.
La ganadería tuvo tanta importancia como la agricultura, los pastos solían ser comunales para los ganaderos de un mismo pueblo y sus vecinos se agrupaban formando asociaciones y manteniendo entre todos un pastor. El lanar adquirió un lugar preferente a partir del S. XII en que se mezcló la raza ovina autóctona con la raza merina procedente de África. Los pastores se constituyeron en gremios, llamadas mestas, que pronto recibieron protección por parte de reyes y señoríos, priorizando sobre los agricultores.
El sector industrial era rudimentario, por regla general cada grupo se autoabastecía de lo necesario. A partir del S. X fueron apareciendo carpinteros, teloneros, etc. El comercio adquirió mayor importancia en la zona mediterránea.
De la H. de los Pueblos. (24)