El fonsado y la hueste.-El fonsado en su origen era una expedición bélica importante, mientras que la hueste era una empresa bélica de menor importancia. Con el término hueste se utilizaba para aludir con carácter general al grupo de gentes armadas. Por su parte el apellido designaba el llamamiento a los vecinos de una localidad para que acudiesen a un determinado sitio, bien para la defensa, bien para realizar un ataque por sorpresa.
La convocatoria se realizaba por todo el territorio al toque de cuernos y bocinas. En León y Castilla, los responsables de los territorios también eran los responsables del reclutamiento, organizando las tropas que se concentraba donde decidía el Rey y en la que estaba esperando el rey con sus tropas.
Las circunstancias de los reclutamientos dependieron de las acciones militares que se fueran a emprender. Así junto a la Hueste, expedición para realizar conquistas o para defender la frontera, aparece la cabalgada, expedición destructiva para debilitar al enemigo y capturar botines y la corredura, acciones rápidas y de muy pocos combatientes. El apellido, nombre con el que se designa con carácter general la llamada a las armas, era una acción militar local de defensa o ataque realizadas con pocos efectivos. Como acciones complementarias fueron importantes la vigilancia (anubda, arrobda, guaita y mirall) como formas de alertar al territorio de un ataque, y la castellaria como forma de reparar y construir fortalezas.
Del Manual de la H. y del Derecho. (43)
La convocatoria se realizaba por todo el territorio al toque de cuernos y bocinas. En León y Castilla, los responsables de los territorios también eran los responsables del reclutamiento, organizando las tropas que se concentraba donde decidía el Rey y en la que estaba esperando el rey con sus tropas.
Las circunstancias de los reclutamientos dependieron de las acciones militares que se fueran a emprender. Así junto a la Hueste, expedición para realizar conquistas o para defender la frontera, aparece la cabalgada, expedición destructiva para debilitar al enemigo y capturar botines y la corredura, acciones rápidas y de muy pocos combatientes. El apellido, nombre con el que se designa con carácter general la llamada a las armas, era una acción militar local de defensa o ataque realizadas con pocos efectivos. Como acciones complementarias fueron importantes la vigilancia (anubda, arrobda, guaita y mirall) como formas de alertar al territorio de un ataque, y la castellaria como forma de reparar y construir fortalezas.
Del Manual de la H. y del Derecho. (43)