VALORES DE NUESTROS PUEBLOS
En el Museo del Comercio se exponen 25 fotografías en blanco y negro que representa el homenaje a toda una generación. Puparelli con sus fotografías nos muestra mas que unos oficios, el esfuerzo de unos hombres y mujeres en el mundo rural que con su sudor y abnegación supieron sacar a adelante una nueva generación que se encontró con el país donde manaba leche y miel.
Esa generación que puso como emblema la honradez en el esfuerzo y como bandera una ilusión suprema para que nosotros tuviésemos mejores ocasiones en la vida que las que ellos tuvieron.
Imágenes que con el paso del tiempo tendrán más valor.
Sus vecinos de Saucelle quedan representados para la posteridad en aquellos oficios que todos conocimos y que a algunos les tocó de refilón (si no de lleno) en sus años de niñez.
Esta generación de hierro donde las jornadas eran de sol a sol y el ocio era considerado haraganería. Su esfuerzo nos trajo una vida cómoda que ellos no conocieron. Cosechadoras, tractores para el campo, frigoríficos y todo tipo de electrodomésticos para las casas y calefacción, ese invento que nos hace superar los inviernos con una comodidad que ni en los mejores sueños.
La fragilidad de la memoria tiende a olvidad el pasado, un pasado de ilusión que nos encaminó hacia una nueva vida de comodidades. Por eso, desde este foro quiero enviarles mi agradecimiento a toda esa generación que nos legaron el mejor de los regalos. Una España en paz con un horizonte de posibilidades que esperemos seamos capaces de legarlas nosotros a nuestros hijos.
Un saludo. Rober.
En el Museo del Comercio se exponen 25 fotografías en blanco y negro que representa el homenaje a toda una generación. Puparelli con sus fotografías nos muestra mas que unos oficios, el esfuerzo de unos hombres y mujeres en el mundo rural que con su sudor y abnegación supieron sacar a adelante una nueva generación que se encontró con el país donde manaba leche y miel.
Esa generación que puso como emblema la honradez en el esfuerzo y como bandera una ilusión suprema para que nosotros tuviésemos mejores ocasiones en la vida que las que ellos tuvieron.
Imágenes que con el paso del tiempo tendrán más valor.
Sus vecinos de Saucelle quedan representados para la posteridad en aquellos oficios que todos conocimos y que a algunos les tocó de refilón (si no de lleno) en sus años de niñez.
Esta generación de hierro donde las jornadas eran de sol a sol y el ocio era considerado haraganería. Su esfuerzo nos trajo una vida cómoda que ellos no conocieron. Cosechadoras, tractores para el campo, frigoríficos y todo tipo de electrodomésticos para las casas y calefacción, ese invento que nos hace superar los inviernos con una comodidad que ni en los mejores sueños.
La fragilidad de la memoria tiende a olvidad el pasado, un pasado de ilusión que nos encaminó hacia una nueva vida de comodidades. Por eso, desde este foro quiero enviarles mi agradecimiento a toda esa generación que nos legaron el mejor de los regalos. Una España en paz con un horizonte de posibilidades que esperemos seamos capaces de legarlas nosotros a nuestros hijos.
Un saludo. Rober.