BARBADILLO: EL PEREGRINAR DE UN SIGLO...

EL PEREGRINAR DE UN SIGLO

Caso singular es el que se nos narra en la pág 31 del libro cuarto de bautismos: “ En el lugar de Barbadillo,… a veinte un días del mes de Febrero del año de mil ochocientos sesenta y uno. Yo D. Manuel Jorge Vázquez párroco de esta Iglesia de Sto. Domingo de Guzmán y sus Anejos, de orden de D. Manuel Mediero, Alcalde Constitucional de dicho pueblo bauticé en ella solemne subcondicione a un niño que según declaración de Úrsula Sánchez apareció en el Portal de su casa el día veinte de dicho mes y año, a las seis de la tarde, con una papeleta desconocida que decía no estar bautizado, al que puse por nombre “Antonio Tomás”, ignorándose sus padres. Fue su madrina Isabel Mª Benito, de ocupación servicial, casada y vecina de Barbadillo…, siendo testigos D. M. M. y J. A.

En la siguiente década a los oficios anteriores se le añaden algunos nuevos como el de guarda del campo, estanquera y con motivo de la nueva carretera Salamanca-Ciudad Rodrigo aparece en 1.862 el de caminero y contratista de carreteras venido de Mojácar (Almería) al que también hay que añadirle el de carpintero, tabernero, lechero, herrero, maestro, aunque son los oficios de labrador, cisquero y jornalero los que se llevan la palma.
D. Gerónimo Domínguez toma el relevo como cirujano a D. Valeriano Guiza para la salud de habitantes y allegados del pueblo y alrededores. Es Dñª Josefa Martín quien hace las veces de maestra para nuestros vecinos de Galindo, también se va dando nombre a quienes ejercen otras profesiones, Juan Vicente, Andrés García y Juan Gómez, carpinteros; Antonio Fraile secretario de juzgado; Isabel Mª hace de tabernera; Antonio Sierra, lechero; Nicolás y Antonio Hdez de herreros; Benigno Mayorga de maestro albañil; D. Juan Rubio, secretario, cede el puesto en 1.869 a D. Mariano de Haro, natural de Madrid y por primera vez figura una maestra de niñas en Barbadillo, Dñª Juana García (1.869).
Como vemos nuevos aires y aumento de casas en la población que comienzan a diseñar un sistema tortuoso y anárquico en aquellas primitivas calles relativamente rectas que contaba con amplias plazas para el ganado. Se comienza a ocupar los espacios interiores apiñando casas y angostando sus márgenes apareciendo nuestras típicas callejas que solo dejaban el paso para una caballería. En un principio nuestro pueblo siguió el típico trazado romano, una especie de cuadrado o rectángulo con calles paralelas. El aumento de población hace dar el salto (salvando la puente Chica) hacia el camino Salamanca, el pueblo crece en su interior comenzando un abigarramiento de viviendas apeguñadas unas a otras ocupando antiguas zonas destinadas a corrales, huertos y zonas auxiliares de las casas, llegando estas en algunas ocasiones a subdividirse para varios propietarios, quedando las más amplias para los que mantenían el oficio de labradores y otras más pequeñas para los que hacían las veces de jornaleros.
Anotaciones-IX. Rober
Anotaciones-VIII. Rober