Si muchos fuimos los que nacimos en los cincuenta también alta es la cifra de fallecidos, ciento treinta y uno de los cuales treinta y dos dejaron la vida siendo niños.
Los certificados de defunción corren a cargo de D. José Méndez Polo (D. Pepe) como los de Albert Maître (francés), viudo, de 86 años fallece a consecuencia de cirrosis ¿Quién sabe las causas que le trajeron a nuestro pueblo? En octubre de 1.954, J. M. B. fallece al mes de edad a causa de espina bífida. En mayo del 55 se deja de poner causa de la muerte y el estado civil. El 20 de noviembre de 1958 es enterrado en este pueblo A. H. H, natural de Sando de Stª Mª, viudo de sesenta y seis años de edad que falleció arrollado por un tren. Y J. M. M fallece el 4 de abril de 1959 a causa de asfixia por inmersión (cayó a un pozo) de 30 años de edad, casado, falleció aproximadamente a la una de la tarde, habiendo aparecido su cadáver horas más tarde que se juzgó no intencionado. El 24 de diciembre de 1960 se entierra a Isabel Mª Ballesteros, natural de Rollán a la edad de 98 años (hasta ahora la más longeva).
En 1.952, D. Amador acomete la idea de construir un centro parroquial para el pueblo, más tarde se optaría por alquilar el salón de baile de mi abuela que se hallaba situado cerca de la iglesia. Dicho cometido es continuado por D. José Ramos pues D. Fernando apenas contó unos meses entre nosotros. Por entonces la parroquia contaba con 1.252 feligreses.
En ese breve espacio de tiempo a D. Fernando le da para redactar la relación quincenal del estado de la Diócesis que ha de enviarse a la Santa Sede.
En los informes sobre la religiosidad que de la parroquia remite al obispado se dice que las personas “Son honestas y cristianas, la vida privada de las familias buena, en general, la vida pública, bastante buena, aunque algo se nota el influjo de las corrientes moderna y neopaganas, cree que hay todavía verdadero espíritu de piedad. La misa dejan de oírla pocos, de hombres un 5 % y de mujeres tal vez un 4%, niños mayores de 7 años y menores de 14 la oyen de ordinario todos.
Una tercera parte del vecindario toma la Bula; otra tercera parte pueden considerarse pobres y no obligados a tomarla y la otra tercera parte restante, en su mayoría por ignorancia y los menos por desprecio, dejan de cumplir estas leyes.
Matrimonios civiles, ninguno; concubinatos, uno y divorcios propiamente ninguno.
Los maestros no celebran en la catequesis parroquial y si acompañan a los niños en la misa y a otros actos de culto.
Únicamente existe la Hermandad Sindical de Labradores y Ganaderos. (7/7/1.952).
Años 50. V. Rober
Los certificados de defunción corren a cargo de D. José Méndez Polo (D. Pepe) como los de Albert Maître (francés), viudo, de 86 años fallece a consecuencia de cirrosis ¿Quién sabe las causas que le trajeron a nuestro pueblo? En octubre de 1.954, J. M. B. fallece al mes de edad a causa de espina bífida. En mayo del 55 se deja de poner causa de la muerte y el estado civil. El 20 de noviembre de 1958 es enterrado en este pueblo A. H. H, natural de Sando de Stª Mª, viudo de sesenta y seis años de edad que falleció arrollado por un tren. Y J. M. M fallece el 4 de abril de 1959 a causa de asfixia por inmersión (cayó a un pozo) de 30 años de edad, casado, falleció aproximadamente a la una de la tarde, habiendo aparecido su cadáver horas más tarde que se juzgó no intencionado. El 24 de diciembre de 1960 se entierra a Isabel Mª Ballesteros, natural de Rollán a la edad de 98 años (hasta ahora la más longeva).
En 1.952, D. Amador acomete la idea de construir un centro parroquial para el pueblo, más tarde se optaría por alquilar el salón de baile de mi abuela que se hallaba situado cerca de la iglesia. Dicho cometido es continuado por D. José Ramos pues D. Fernando apenas contó unos meses entre nosotros. Por entonces la parroquia contaba con 1.252 feligreses.
En ese breve espacio de tiempo a D. Fernando le da para redactar la relación quincenal del estado de la Diócesis que ha de enviarse a la Santa Sede.
En los informes sobre la religiosidad que de la parroquia remite al obispado se dice que las personas “Son honestas y cristianas, la vida privada de las familias buena, en general, la vida pública, bastante buena, aunque algo se nota el influjo de las corrientes moderna y neopaganas, cree que hay todavía verdadero espíritu de piedad. La misa dejan de oírla pocos, de hombres un 5 % y de mujeres tal vez un 4%, niños mayores de 7 años y menores de 14 la oyen de ordinario todos.
Una tercera parte del vecindario toma la Bula; otra tercera parte pueden considerarse pobres y no obligados a tomarla y la otra tercera parte restante, en su mayoría por ignorancia y los menos por desprecio, dejan de cumplir estas leyes.
Matrimonios civiles, ninguno; concubinatos, uno y divorcios propiamente ninguno.
Los maestros no celebran en la catequesis parroquial y si acompañan a los niños en la misa y a otros actos de culto.
Únicamente existe la Hermandad Sindical de Labradores y Ganaderos. (7/7/1.952).
Años 50. V. Rober