Me guastaría despedirme de todos vosotros con una copla que se cantaba, allá, a mediados del siglo XX en las tabernas que existieron en nuestro pueblo, pero la memoria ya es traicionera y no soy capaz de hilvanar ni el tono ni la letra de aquellos ingeniosos talentos que alegraron las tardes de los domingos.
“Si vas a casa del Porrón ten cuidado con el vino
que se sube a la cabeza y ya no ves el camino.
En casa el Cuco lo dan barato y de buen gusto,
entran ganas de cantar con el vino del tio Cacharra,
en la bodega del tío Flores y en la taberna del tio Cata”.
Hasta siempre Barbadillo.
Roberto Gómez García.
“Si vas a casa del Porrón ten cuidado con el vino
que se sube a la cabeza y ya no ves el camino.
En casa el Cuco lo dan barato y de buen gusto,
entran ganas de cantar con el vino del tio Cacharra,
en la bodega del tío Flores y en la taberna del tio Cata”.
Hasta siempre Barbadillo.
Roberto Gómez García.