Puente de origen incierto, hay quien dice que en este lugar existió uno romano, pero el que ha llegado hasta nosotros tiene su origen en el siglo XIII, cuando el rey portugués D. Dinis I de Portugal, en virtud de tratado de Alcañices, en 1297, se hizo con el pueblo de San Felices de los Gallegos. A lo largo de los siglos ha sufrido destrucciones por guerras y por riadas enormes.