La falta de sensibilidad por parte de las compañías de servicio eléctrico o telefonía, que son las que realizan estos feos tendidos de cable sobre escudos nobiliarios y otras partes de monumentos, debería estar prohibida y castigada severamente ya que deterioran la piedra y estropean lo tallado en ellas, además de dar fealdad al monumento, lo que nos da una idea de la incultura extendida a amplios ámbitos sociales y la despreocupación e ignorancia de la autoridades locales y encargadas de velar por el patrimonio.