En Castilla
León lo típico del día de la fiuta del patrón, en este caso
san Miguel Arcángel (la aparición) que se celebra en mayo, es una misa a la que acuden los mayordomos acompañados por el tamborilero. En la actualidad ya no suele haber mayordomos y entre todo el
pueblo junto con el
ayuntamiento se financia la
fiesta. El tamborilero interviene en el momento de la consagración. A las salida de misa sigue tocando su flauta mientras los asistentes se saludan. Después hay un aperitivo para todos los asitentes al que también se suma el tamborilero.