he sentido gran alegría cuando he visto su mensaje. Cuando usted salió del pueblo yo no había nacido pero he oído hablar mucho de su familia. Eugenio viene muy a menudo, siempre es un placer oírle hablar de la historia de mi pueblo y de sus alrededores. Visita el hogar de los jubilados cuyo presidente es Nazario, allí pasan buenos ratos recordando viejos tiempos. Gracias por ofrecernos sus servicios, pero es mejor que nos conozcamos cuando venga a visitar nuestro pueblo. Muchas cosas han cambiado, hace años que ya no se oye el bullicio de los niños en el recreo porque la escuela se cerró. El antiguo palacio es ahora un gran local para centro social, y la casa donde usted vivió tuvieron que derrumbarla. No obstante mi pueblo, a pesar de que haya gente que quiera desprestigiarlo es un gran pueblo. Le invito a que se pase por aquí y pueda comprobarlo. Un saludo.