Siempre esperamos con ilusión la llegada del
verano para poder estar en ese pequeño y bonito
pueblo. Nos encanta mirar esas estrellas en las
noches de verano tan fresquitas. La tranquilidad y la paz que tiene es una maravilla. Y por las noches a tomar el cafetito en la
puerta de Ester. Los hijos de Matias.