Si este roble hablara. Testigo de tantos momentos de nuestra niñez,
juventud. Ahora nosotros también notamos el paso del tiempo y los hijos de los que un día se fueron de su
pueblo nos sentimos un poco como ellos y aparece la nostalgia de lo que en un tiempo fué
el Milano...
Habia una vez un roble que crecía fuerte entre grandes
piedras, en tierras duras, con severo clima; helados
inviernos de escarcha y carámbanos, calurosos y secos
veranos de polvo y paja. El
árbol se afanaba por extender sus
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