Todas las casas tenían y aun tienen su bodega en la que se elaboraban ricos vinos procedentes de las abundantes viñas de su término municipal, además de ser lugar donde guardar otros productos: matanza, patatas, calabazas, etc.
Fue importante casa de familia nobiliaria en la cual se conserva el blasón y la buena factura de su construcción en sillares perfectamente cortados y colocados.
Buen lugar para protegerse de los rayos solares en los días más calurosos del verano.
Es un bue lugar, a la sombra, para ver la llegada de viajeros al pueblo.
Bodega en la que se elabora un excelente vino. Es pequeña y el trabajo que en ella se lleva es artesanal. Si vas a este pueblo, no dejes de preguntar por ella y comprar algo de vino. No te arrepentirás, te lo aseguro.
En este pueblo pasó su vida el poeta, nacido en la localidad zamorana de Tábara, León Felipe. Su padre fue notario en este pequeño pueblo cuando el mismo era la capital administrativa de la sierra de Francia.
Es positivo recordar a personas ilustres que han nacido en un pueblo.
Los rincones y recovecos de este pueblo no dejan indiferente.
Buenos servicios rendían estos modestos útiles domésticos en aquellos tiempos en los que la electricidad ni se vislumbraba. Su origen es antiguo, pues las civilizaciones primitivas ya utilizaban elementos similares para alumbrarse utilizando la grasa de los animales; en este, lo más probable, es que el combustible utilizado fuera el aceite de oliva extraído en las almazaras locales.
Algunas casas, como la que aparece en la imagen a la derecha, son revestidas de teja en la fachada orientada al lugar por donde es más azotada por la abundante lluvia que cae en el lugar.
En tiempos se ubicaba en este inmueble la Casa Consistorial del pueblo, ahora alberga, entre otros servicios, el consultorio médico.
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