Anónimo, ¿eres tú?
¿El que me llama siglero?
No puede ser, no es así,
Pues demuestras más talento
Ya que aceptas con agrado
Cuantas fotos coloquemos.
Mas no dudes ni un instante
De que a La Alberca queremos.
No soy de ahí, de La Alberca,
Ni vivo ahí, ni en mi pueblo.
Mas salmantina sí soy
los llevo en mi pensamiento,
Pues yo también como tú
Ahora me encuentro lejos.
Y si yo pudiera estar
Allá en mi pueblo, mi “patria”
No dudes daría el abrazo
A nuestra Peña de Francia.
Explícame, por favor,
Lo de la Peña del Huevo,
Estoy yo muy despistada,
Esa peña no recuerdo.
Anónimo, aprendiste bien
Las lecciones del maestro,
Que Manolín te enseñó
En el arte de los versos.
No conocí a Manolin,
El que te enseño, poeta,
Pero siempre me gustó
Leer y escribir poemas.
Gracias te doy chaval
Por esas ricas obleas,
Mas también me puedes dar
Turroncillo de tu tierra,
Pues recuerdo en mi niñez,
Allá en mi pueblo, no lejos,
Turroneras de la Alberca
Vendiendo turrones buenos.
M. P. (Maravillosa Paisana)
¿El que me llama siglero?
No puede ser, no es así,
Pues demuestras más talento
Ya que aceptas con agrado
Cuantas fotos coloquemos.
Mas no dudes ni un instante
De que a La Alberca queremos.
No soy de ahí, de La Alberca,
Ni vivo ahí, ni en mi pueblo.
Mas salmantina sí soy
los llevo en mi pensamiento,
Pues yo también como tú
Ahora me encuentro lejos.
Y si yo pudiera estar
Allá en mi pueblo, mi “patria”
No dudes daría el abrazo
A nuestra Peña de Francia.
Explícame, por favor,
Lo de la Peña del Huevo,
Estoy yo muy despistada,
Esa peña no recuerdo.
Anónimo, aprendiste bien
Las lecciones del maestro,
Que Manolín te enseñó
En el arte de los versos.
No conocí a Manolin,
El que te enseño, poeta,
Pero siempre me gustó
Leer y escribir poemas.
Gracias te doy chaval
Por esas ricas obleas,
Mas también me puedes dar
Turroncillo de tu tierra,
Pues recuerdo en mi niñez,
Allá en mi pueblo, no lejos,
Turroneras de la Alberca
Vendiendo turrones buenos.
M. P. (Maravillosa Paisana)