RECUERDO A D. OSCAR MÜLLER
(1865,Franfurt (
Alemania)-Alberguería de Argañan (
España) 1936)
Alberguería de Argañán,
pueblo de PRIMÉRA , siempre y especialmente durante todo el Siglo XX. Desde el principio del siglo tuvo un
salto de agua productor de energía eléctrica, La
Fábrica del Risco que así se llamaba y como tal funcionaba.
El artífice o artífices de tamaña osadía en los tiempos que corrían fueron dos personas foráneas de Alberguería y sus alrededores y desde esta página queremos rendir un postrero
homenaje a estas dos personas que trajeron a nuestro pueblo el mayor adelanto, hasta entonces conocido, de la humanidad., la Energía Eléctrica, descubrimiento que hoy nos parece obvio pero que entonces fue el gran impulsor del siglo XX.
Estas dos personas fueron D. OSCAR MÜLLER y PEDRO LOZANO CRESPO. El primero nacido en Alemania un 6 de agosto de 1865 y fallecido en Alberguería de Argañan, España, en 1936, el 24 de enero. El segundo nacido en
Valladolid el 23 de febrero de 1886 y fallecido en
Madrid el 8 de noviembre de 1975.
D. Oscar Müller, de 40 años, ingeniero Alemán, contactó con un
joven rebelde de Valladolid, hijo de pintor de "brocha gorda" que tenía 6 hijos, dos de los cuales habían nacido en Valladolid y el resto en Bilbao, y se pusieron a buscar un lugar idóneo para poner en marcha los conocimientos del Alemán. Desde Bilbao recorrieron la geografía española hasta llegar a ALBERGUERÍA DE ARGAÑAN y allí, aquí, se fijaron en la
cascada del RISCO que ya tenía un
molino de
Piedra. Esto ocurría en 1906 y desde esta fecha a 1908 se dedicaron a levantar una presa con mas capacidad y moderna en la misma ribera del Risco y a unos metros por encima de la Pesquera del molino y comenzaron la instalación de la Fábrica de Harinas del Risco. La caída del agua era importante y abundante por lo que además de mover los motores de la fábrica, bien podía mover un generador de mas potencia y dar alumbrado a los tres
pueblos que estaban en línea Alberguería, municipio de la ubicación de la industria y
Fuenteguinaldo lugar interesante y comercial en aquella época y con una población de unos y para llegar a este se debía pasar por
Casillas de Flores por lo que se aprovechaba la circunstancia para también facilitar el suministro energético.
En
Salamanca, solo Ciudad Rodrigo a un día de
camino, tenía energía eléctrica (luz) que provenía de la Hidroeléctrica del Agueda, cuyo salto estaba en
Puerto Seguro.
Los tres pueblos mencionados de Alberguería, centro productor, Casillas de Flores y Fuenteguinaldo, tenían luz eléctrica y pagaban su utilización en especies.
Pedro se echa novia y se
casa con MARGARITA DOMINGUEZ MARTÍN de
Navasfrías, hija de Ana y Francisco, (conocido como "tío Chicuelo") que tuvo tres hijos siendo Margarita la mayor. Margarita nació un 23 de febrero de 1887 y falleció en Madrid un 24 de febrero de 1986 y se quedan en Alberguería. D. Oscar, que así le recuerda el pueblo, para siempre.
D. Oscar, por su procedencia, Alemania, cuna del protestantismo, era protestante y cuando le sobrevino la muerte, no podía recibir cristiana sepultura en el
cementerio del pueblo que era católico, fue enterrado en el recinto pero en un lugar reservado para los "ateos". Hoy el cementerio es todo una unidad y no hay diferencia de creencias.
D. Oscar que trajo a Alberguería el mayor invento conocido, que dio progreso y bien estar a nuestro pueblo, Casillas de Flores y Fuenteguinaldo, casi no tuvo lugar para descansar para la eternidad. ¡Eran otros tiempos! y desde aquí seguro que todos los ALBERGALLOS le están pidiendo perdón.
Pedro Lozano, D. Pedro, para muchos, nos dejó cuatro hijos: Pedro, Mª
Cruz , José y Tere, que salvo esta última, nos han dejado para siempre, solo los hijos de José vienen de vez en cuando a las
fiestas. Pero nos queda La Fábrica que aunque la inundación del 2 de julio de 1961, a eso de las tres de la tarde, la arrasó casi por completo y estuvo a punto de llevarse a sus últimos moradores de la Saga Lozano. ¡El mismo estaba allí !. El
Ayuntamiento ha hecho en su entorno un
merendero que si el año ha venido un poco normal en la
lluvia del
invierno, en la
Fuente de la Fábrica tenemos el mejor refrigerador, no hace falta nevera para poner las bebidas.
Así, de esta forma, cuando en pleno estío nos acercamos a disfrutar de la tranquilidad y el sosiego de las vacaciones podemos, en este punto, volver a recordar a dos hombres que vinieron desde fuera nos dieron todo y aquí dejaron su vida.
Falta una
placa en su memoria, a ver si el Consistorio lo tiene en cuenta y las próximas vacaciones allí la vemos. Se lo merecen.