DESDE LA IMAGINACIÓN A LA REALIDAD: LOS HORCOS
Siempre añoré conocer esa vertiente de agua, esas intrigantes laderas y barrancos, canteras, estampas; lugares tan fotografiados y admirados por mi pueblo como la esencia de los espíritus que guardan estas montañas. Jamás consideré las posibilidades de algún día hollarlas, pisar con mis botas tan enigmática hazaña.
Cuando nos acercamos a los corrales de tío Bichín nos recibieron dos perros. Ladraban como si reprendieran, se acercaban a nosotros ... (ver texto completo)
Siempre añoré conocer esa vertiente de agua, esas intrigantes laderas y barrancos, canteras, estampas; lugares tan fotografiados y admirados por mi pueblo como la esencia de los espíritus que guardan estas montañas. Jamás consideré las posibilidades de algún día hollarlas, pisar con mis botas tan enigmática hazaña.
Cuando nos acercamos a los corrales de tío Bichín nos recibieron dos perros. Ladraban como si reprendieran, se acercaban a nosotros ... (ver texto completo)